Se denomina abfracción a la "lesión en forma de cuña
en el LAC (limite amelocementario) causada por fuerzas
oclusales excéntricas que llevan a la flexión dental".
El componente lateral o excéntrico en sentido vestíbulo-lingual de las fuerzas oclusales que aparecen durante la parafunción provoca un arqueamiento de la corona dentaria que toma como fulcrum la región cervical. Estas fuerzas parafuncionales se concentran en el limite amelocemenatario, siendo estas las que flexionan al diente creando tensiones a nivel del tercio gingival de los dientes.
Con esta deformación que sufre el diente, comienza la
perdida de estructura dentaria donde se concentró la
tensión.
El resultado sería la ruptura del esmalte cervical donde es más delgado, seguido del desprendimiento de las varillas adamantinas.
El resultado sería la ruptura del esmalte cervical donde es más delgado, seguido del desprendimiento de las varillas adamantinas.
La presencia de abfracciones tiene un valor diagnostico por representar un signo de disturbio oclusal.
El desgaste del bruxismo transforma las inclinaciones
cuspideas en superficies planas, dirigiendo las fuerzas en
sentido axial y minimizando la flexión dentaria. Las fuerzas paralelas al eje mayor del diente y que incidan fuera del tejido de sustentación del mismo serán
lesivas y producirán flexión. Los dientes con movilidad no desarrollaron este tipo
de lesiones ya que la propia movilidad disipa la fuerza del
stress oclusal.
El bruxismo puede generar movilidad dentaria o desgaste. Por lo tanto si se está en presencia de un paciente bruxómano, si el diente se mueve o el diente esta desgastado (atricionado), la abfraccion estará muy atenuada o no estará presente.
El bruxismo puede generar movilidad dentaria o desgaste. Por lo tanto si se está en presencia de un paciente bruxómano, si el diente se mueve o el diente esta desgastado (atricionado), la abfraccion estará muy atenuada o no estará presente.
La abfracción clínicamente tiene una forma de cuña
profunda con estrías y grietas, con ángulos ásperos, márgenes definidos, pudiendo presentarse en múltiples
superficies en una pieza y rara vez llegan a ser circunferencial.
Es frecuente observar abfracciones vecinas a encías
totalmente sanas.
Una característica clínica que puede acompañar a la abfraccion es la recesión del margen gingival.
Una característica clínica que puede acompañar a la abfraccion es la recesión del margen gingival.
Es frecuente recibir en la consulta pacientes con una técnica de cepillado desmejorada producto de que su odontólogo le ha informado que las lesiones del tercio gingival de sus dientes se deben a un cepillado muy fuerte o a una "mala técnica de cepillado". Lo que realmente sucede es que la técnica de cepillado muy poco o nada tiene que ver con estas lesiones que tienen su origen en contactos oclusales prematuros o incorrectos y estos deben ser eliminados para que las fuerzas dañinas para el tercio gingival no sigan modificando la estructura molecular del esmalte, de la dentina y del cemento creando estas descalcificaciones. El tratamiento restaurador solo entonces puede realizarse sin temor a que las lesiones sigan avanzando.
Si las cargas oclusales dañinas continúan pueden llevar a la fractura de la corona del diente, especialmente a nivel del cuello estrecho que tienen los premolares.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Deja tu comentario o pide una cita:
Para citas deja tu tlf o correo electrónico para confirmación